Apoyemos la lucha de los trabajadores subcontratados de ENAP
Domingo, 08 Mayo 2022 22:42Los trabajadores subcontratados de ENAP de la región del BioBio, agrupados en Fenatrasub, llevan una semana de movilización paralizando parcialmente la refinería en Huelén y afectando el terminal marítimo de San Vicente.
Reclaman a la gerencia de ENAP la puesta inmediata de una “mesa de trabajo” con el fin de abordar la situación de los trabajadores subcontratados, en particular las amplias diferencias de salarios con los trabajadores de planta.
Desde la gerencia de ENAP se han negado a establecer el diálogo y han culpabilizado a los trabajadores de un potencial desabastecimiento de combustible en el país. Estas declaraciones las realizaron en el momento en que el bloqueo y lock out de las patronales camioneras, orquestado y concertado por los grupos económicos como la CMPC (grupo cómplice de la dictadura en el asesinato y desaparición de luchadores obreros y campesinos), iniciaban un lock out patronal de las plantas de celulosa, exigiendo “mayor seguridad”, es decir, una mayor represión y presencia policial y militar.
El gobierno de Boric, solícito con el chantaje patronal, posando de no abandonar su discurso “progresista” de levantar el Estado de excepción, sacó de la galera un “estado intermedio”. Mayor presencia de carabineros en las ciudades y presencia militar en las rutas, con vigilancia de drones, etc, etc. Una política represiva de continuidad, como se vio en el pasado día del trabajador donde la represión y el amparo de bandas lúmpenes, terminaron hiriendo de bala a manifestantes, quedando Francisca en estado de extrema gravedad, lo que se suma a la represión sistemática hacia los estudiantes, a las luchas por las liberación de los presos y el asesinato por bandas armadas de un comunero mapuche en la toma de un fundo en la zona sur.
Pretendiendo amedrentar al boicot camionero, Boric, puso en la misma bolsa a los trabajadores subcontratados de Enap, amenazando con la intervención represiva y la aplicación de la ley de seguridad del Estado.
Ante la impopularidad de la escalada patronal camionera-forestal, éstos decidieron retroceder y desmovilizar a sus huestes a sueldo.
Mientras tanto los trabajadores se han mantenido firmes en su lucha pese a estas amenazas y amedrentamientos, y en boca de sus dirigentes esperan que este gobierno cumpla la promesa de que estaría del lado del pueblo.
Diversos diputados y personeros de gobierno se han expresado apoyando la lucha de los trabajadores subcontratados y hasta han exigido la renuncia del gerente de ENAP. Eso sí, el tono ha estado marcado por los llamados a deponer la movilización. Como lo hizo Norberto Díaz, ex vicepresidente de la CUT y presidente de la Federación de trabajadores de ENAP, diciendo que “La lucha laboral es legítima, pero nada justifica que se ponga en riesgo el abastecimiento de hospitales, servicios públicos, cuarteles de Bomberos y consumidores en general”.
Y es que una cosa es “lidiar” con el boicot y lock out de una patronal que calculará costos y beneficios, descargando los primeros sobre las espaladas de los trabajadores y otra muy distinta es cuando se pone en acción la clase obrera que puede paralizar toda la producción capitalista donde reside el poder de la burguesía.
Desde distintas organizaciones sindicales han manifestado su apoyo a las medidas como algunos sindicatos de planta de ENAP Bio Bio, así como desde sindicatos portuarios y otros. Es importante extender esta lucha a nivel nacional de todos los trabajadores subcontratados de ENAP, colocando como norte el pase a planta de todos los trabajadores, siendo absorbidos por la mandante y ajustando la escala salarial al costo de la canasta familiar, sin depositar una gota de apoyo en los patrones “pymes” de las contratistas que esperan, frotándose las manos, que les mejoren los contratos para cortar su tajada y mantener a los trabajadores en la misma situación de miseria.
Es preciso avanzar hacia el control obrero de esta rama estratégica para la producción del país para controlar la producción, distribución, abastecimientos y precios de producción, que hoy amenaza a la población con especulación y racionamientos energéticos.
Todos por el triunfo de los trabajadores subcontratados de ENAP