Segunda vuelta, dos candidatos para atacar a la clase obrera
Friday, 12 December 2025 19:46Por Marcos Álvarez
Este domingo 14 de diciembre se realizará el balotaje electoral, donde se determinará quien compondrá la junta de administradora de los intereses capitalistas.
Ambos candidatos tanto la oficialista Jara (PC- Frente Amplio y ex concertas) y el ultraderechista Kast (representante de partidos pinochetistas), se aprestan bajo distintos matices a administrar los intereses de la burguesía. Ambos candidatos coinciden en el reforzamiento del aparato represivo del estado burgués y la criminalización de la clase obrera. Ambos coinciden en continuar con esta línea de “orden burgués” y reivindican los desalojos y la represión a las tomas por vivienda, solo que se diferencian en los ritmos en que se llevara a cabo, y si se hará mediante el garrote y la zanahoria como lo hace el gobierno de Boric (con la maniobra ante las elecciones de expropiación parcial que solo significa división y engaño para la toma de San Antonio), o con la línea de respetar los fallos judiciales, lo que significa el garrote directamente como lo anuncia el ultraderechista Kast.
La línea del imperialismo para Latinoamérica es la de reforzar su dominación sobre su patio trasero, mediante una política más agresiva. Como lo vemos en Venezuela, o con los planes de reformas laborales como la que busca imponer Milei en Argentina, que toma la receta del gobierno “progresista del PC- Frente Amplio” para establecer flexibilidad de jornada y acuerdos individuales, o con la burocracia sindical.
Para la burguesía se trata de imponer una relación capital- trabajo para asegurar su pervivencia como clase parasitaria. En ese sentido se inscribe el debate sobre el fin de la “indemnización por años de servicio”, que amaga Kast para añadir aún más flexibilidad concediéndole uno de los anhelos más importantes que ha tenido la patronal. En todo caso, con Piñera las patronales buscaron que se hiciera una reforma a las indemnizaciones pero esto hizo mucho ruido en la clase obrera que lo tiene como una conquista mínima ante el despido arbitrario de los patrones, y que puede convertirse en un factor que incendie la pradera. No es descartable que la burguesía reavive este plan, tomando en cuenta la fragmentación y estatización de los sindicatos que se encuentran atados a la legalidad burguesa, y al accionar traidor de la burocracia, que durante el gobierno actual pactó una tregua con la burguesía para dejar pasar los ataques contra la clase obrera con despidos, flexibilidad, y ajustes.
En este escenario burgués de elecciones llamamos a votar nulo.
Por una salida obrera
Ante la crisis de la vivienda, los despidos, y ataques a las condiciones de la clase obrera y el pueblo, debemos imponer el control obrero por rama de la producción, la escala móvil de salario y de horas de trabajo. Debemos impulsar un congreso obrero con delegados con mandatos y revocables para discutir un plan de lucha ante estos ataques y forjar una salida obrera.
Debemos saldar la crisis de dirección revolucionaria, unificando a la vanguardia para preparar las próximas batallas. Se hace necesaria la construcción del partido de la revolución proletaria mundial, la Cuarta Internacional.









